restaurante vegetariano en madrid
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INFORMACIÓN
 

Restaurantes Vegetarianos en Madrid:
El Estragón Vegetariano

En cierta manera, los restaurantes vegetarianos resultan un poco frustrantes. Algunos de los restaurantes vegetarianos convierten una comida vegetariana en algo muy incómodo. Las paredes de color blanco hospital, la insípida comida, el correoso arroz integral, los carteles que prohíben fumar o la música New Age, me hacen asociar la cocina macrobiótica con los antibióticos.


Por este motivo, El Estragón me ha impresionado tanto. Situado en la pintoresca Plaza de la Paja, este restaurante vegetariano de Madrid está a años luz de los espartanos comedores que se hacen pasar por restaurantes vegetarianos. El Estragón convierte la cocina vegetariana en una fiesta que permite abandonarse a una buena comida.

Hasta la decoración es distinta... parece un restaurante normal. Construido en tres niveles, los azulejos blancos y azules son una reminiscencia de las tabernas andaluzas; unas lámparas de metal y unos grandes abanicos cuelgan sobre las mesas cubiertas con manteles. En este restaurante vegetariano la música es alegre y va desde el flamenco hasta el soul o los blues. Puedes elegir sentarte en un rincón apartado o bien unirte a un animado grupo de comensales en uno de los comedores. Desde el piso superior, se puede admirar unas magníficas vistas de la plaza.

Para empezar, elegimos ensalada de arroz y vichyssoise. La ensalada de arroz es un plato abundante y constituye una comida de si-misma. La lechuga está admirablemente dosificada y el chef combina los pimientos rojos, las rodajas de champiñón crudo, las aceitunas y el tomate con un apetitoso arroz integral. La vichyssoise -una cremosa sopa fría de puerros- es muy refrescante y perfectamente satisfactoria.

Nuestros segundos platos fueron el Pastel tres Colores y las Crepes a la Mouselina. El pastel recordaba la bandera de Irlanda sobre un cielo o fondo de bechamel -espinacas, patatas y zanahorias-, dispuestas en esponjosas filas. Las crêpes -ligeras y crujienes, rellenas de verduras y pasas- recubiertas de mayonesa, espolvoreada con semillas de sésamo, recordaba, y por qué no, a una pintura impresionista en un paisaje marciano de Pathfinder. Como guarnición, nos sirvieron berenjenas rebozados, rociadas con zumo de limón fresco. Delicioso.

Respecto a los postres, yo soy siempre previsible. Cualquier plato que contenga chocolate me hace automáticamente obviar las otras posibilidades. La sandía fresca es un plato muy sano, pero yo nunca lo pido. La tarta de chocolate fue demasiado para nosotros pero el esfuerzo merecía la pena; aunque casi anulaba el efecto de "comida sana" de los platos de verduras.

Esta es precisamente una de las cosas que más me gustan de El Estragón. Es un restaurante vegetariano para la gente que disfruta comiendo: es un lugar donde no se nota que no figura carne en la carta. Es el lugar que los vegetarianos de madrid llevan mucho tiempo esperando.


Leopold Connolly

 

  Diseño Carmen Nieto Alvarez